El cambio climático es una alteración a largo plazo en los patrones del clima de la Tierra, impulsada principalmente por las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana. Sus consecuencias ya se están manifestando: aumento de temperaturas, fenómenos meteorológicos extremos, deshielos y alteraciones en los ecosistemas. Uno de los recursos más afectados por esta crisis es el agua. El calentamiento global intensifica las sequías, reduce la disponibilidad de agua dulce, altera los ciclos hidrológicos y amenaza la seguridad hídrica de millones de personas. Las inundaciones más intensas, la disminución del agua subterránea y la pérdida de calidad del agua son solo algunas de sus consecuencias. Ante esta situación, es urgente tomar conciencia y actuar de forma responsable para proteger nuestro planeta y garantizar este recurso vital para todos. Desde nuestras comunidades podemos marcar la diferencia: cuidar el agua, reducir residuos, utilizar energías limpias y promover una cultura ambiental son acciones esenciales. Recordemos que cada gota cuenta y que el compromiso colectivo es clave para enfrentar esta emergencia global. Por una seguridad hídrica; ¡Cuidemos el agua!
viernes, junio 20, 2025
