Considerado como icono no solo de Matehuala, sino del Altiplano Potosino, el templo San Salvador de Orta observa un grave deterioro físico, por lo que algunos fieles católicos han solicitado a la Diócesis que le dé mantenimiento a la construcción, antes de que surjan desgastes o pérdidas irreparables.
En una misiva enviada al obispo de Matehuala, Margarito Salazar Cárdenas, se pide darle mantenimiento y se incluyen datos que dan relevancia histórica a este templo, ubicado frente a la plaza de armas y que fuera el primer santuario del «Cristo de Matehuala».
El Templo San Salvador de Orta no solo ha sido víctima del sol y la lluvia que han desgastado sus paredes; también muestra síntomas de vandalismo, lo invade la hierba y hasta le crecen árboles en sus torres, lo que demuestra un alto riesgo de que pierda parte de su construcción si no se le da el mantenimiento oportuno.
De acuerdo con historiadores, es el primer templo que se construyó en la ciudad en el siglo XVII, como capilla de una hacienda para venerar al Santo Cristo, y en 1799 fue elevado como parroquia por el Gobierno Eclesiástico de Guadalajara, quedando independiente de Charcas.
En el actual pintificado del Obispo Margarito Salazar Cárdenas se han visto grandes avances en la terminación de la catedral, por lo que es posible que la diócesis determine rescatar el templo San Salvador de Orta, considerado también como un legado de nuestros ancestros.
